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viernes, 9 de diciembre de 2022

Bolsa vichy

La tela de vichy ha sido la gran protagonista de verano, en ropa y en complementos. Y la que va en blanco y negro se ha visto muchísimo. No hacía más que ver modelos con esta combinación y me animé a hacerle una bolsa para el cumple de mi sobrina. Vichy de cuadro pequeño por fuera y un forro rojizo por dentro.


La tela exterior la compré en la tienda de Getxo Lindau, es una mezcla de algodón con acrílico, perfecta para una bolsa de este tipo. La tela interior, que creo que le va estupendamente, la había comprado en el mercadillo y es una mezcla o acrílico con cuerpo que la hacía apropiada para su labor de forro de bolso.



Una bolsa de este tipo o tote bag es bastante sencilla de hacer y si te gusta, hay infinidad de tutoriales en Youtube.

Las medidas de la bolsa son de 42 cm de ancho por 45 de alto.



 Le puse dos bolsillos, uno grandote, normal, para meter el móvil por ejemplo y otro, también grande, con cremallera, para poder meter la cartera y que esté segura cuando vamos por la calle.




El tema de las asas... a mi me gusta la tira tipo mochila, pero de algodón y no es tan fácil de conseguir. Esta la compramos online, no sé muy bien donde porque me la cogieron.





El último detalle es una chapita de madera de "hecho a mano", que compré hace tiempo en la Feria Creativa en Bilbao. Al lado le bordé un pequeño corazoncito. 







Me encanta como ha quedado y hasta es posible que me haga una para mi el próximo verano.

sábado, 15 de octubre de 2022

Love note a la segunda

Hace unos meses junto a mis amigas tejedoras, nos pusimos a hacer este jersey, el Love Note. Entonces equivoqué la talla, me quedó gigante y terminó en el cajón de las labores olvidadas.



En Instagram, Paula, que tiene un podcast llamado "Tres pompones", abre una propuesta en estos últimos meses del año, llamada "Ya vale Kal" en la que nos anima a sacar nuestras labores sin terminar, examinarlas y hacer una valoración de lo que queremos realmente terminar y de lo que debemos deshacer y a otra cosa mariposa. Este año me presenté a esta propuesta con este jersey, que estaba convertido en ovillos. Lo empecé el primero de septiembre y en la primera semana de octubre estaba terminado. Y ya está bloqueado y estrenado... ¡¡¡milagro!!!




El Lovenote sweater es uno de los más tejidos en el mundo tejeril. Es de un pareja de tejedoras canadienses llamadas Alexa y Emily. Una es profesora, la otra arquitecta y llevan 12 años diseñando juntas bajo el nombre de Tin Can Kints (tejidos de lata).



El Lovenote, notas de amor, es un jersey sencillo y efectivo, Se teje con una lana fina y aguja gorda, tiene un canesú de calado sencillo pero resultón y viene con instrucciones para hacerlo crop o un poco más largo y con desnivel en el bajo. Queda muy mono para llevarlo encima de vestidos, por ejemplo.



En el blog que escriben las autoras cuentan que el jersey surgió cuando una de ellas tenía que hacerse algo para una boda y se le ocurrió este modelo. Pues tuvo ojo porque, como ya digo, es de los más repetidos en el mundo tejeril. En la plataforma de patrones Ravelry tiene más de 10.000 proyectos.




La primera vez que intenté hacerlo me equivoqué de talla, hice una que me quedó muy grande. Esta vez elegí mejor, la M, como otras compañeras que se lo habían hecho y aunque aún así tuve mis dudas, seguí con ella. Es un jersey fácil de tejer y, como digo, muy resultón.



Una vez más, mi prenda sale de mi alijo lanero, de una lana peluda, tipo mohair pero creo que con acrílico, comprado en Hilados Gordobil, que compré hace mil años para hacer una prenda que nunca llegó a ver la luz. Le uní un hilito muy fino en azul oscuro, comprado en la tienda Slowwet, de Barakaldo.



Y con este jersey, vuelvo a retomar el blog... a ver si sigo!!







sábado, 11 de junio de 2022

Día mundial de Tejer en público

Hoy, 11 de junio, es el Día mundial de tejer en público, una fecha que viene celebrándose desde 2005 y en el que personas de todo el mundo sacan a la calle sus labores y enseñan lo que normalmente se hace en casa. O se hacía, porque cada vez más gente lleva su labor de punto o de ganchillo y la saca cuando tiene un ratito, cuando está en una sala de espera, mientras los niños hacen sus actividades, cuando va al parque o la playa... 

Foto Juan Manuel Báez Mezquita.  Miranda del Castañar 1976


Es una reivindicación de una actividad que reporta beneficios a nivel cerebral, físico y que, cada vez más y gracias a las redes sociales, conecta a personas de todo tipo y condición y de cualquier parte del mundo. Hablamos ya de este día en el blog, aquí.

Pero este día vuelve a aparecer en el blog, conectando dos de mis aficiones, las cosas del pueblo y tejer, porque hablando un poco de todo, mi padre me comentó que en el pueblo también se tejía en público. Como ya he contado en varias ocasiones y en el post señalado antes se puede leer, en el pueblo se tejía en los hilanderos, en esas tardes-noches del invierno en el que las mujeres y los hombres se reunían en una casa, ellas para seguir trabajando, hilando la lana o tejiendo jerseys y medias, ellos más ociosos. 

Foto que encontré en la red, pero no apunté su origen, lo siento.


Fotografía de una mujer de Arrate tejiendo, hecha por Indalencio Ojanguren, recogida en Gipuzkoa Kultura y que publicó en Instagram el grupo Ahari Laboratory, aquí.


Se hacía porque no había otra, no se tenía donde comprar y o se hacía en casa o no había que ponerse. Pues en casa me contaron que no era raro ver a personas que se llevaban la labor fuera, normalmente mientras iban con la vacada o estaban pastoreando los ganados.

En casa recordaban a algunas mujeres que se llevaban el huso y un barcao de lana y mientras las vacas pastaban, aprovechaban para ir hilando.

Mujer hilando, fotografía del blog del Profesor Pérez Mencía, Patrimonio Popular.


Pero también los hombres tejían: aquellos que estaban solteros y que no tenían una mujer que le hiciera las prendas (así era la división del trabajo), aprendieron a darle a las agujas y se hacían los calcetines mientras cuidaban el ganado.

El caso es que buscando información gráfica sobre esto, he encontrado fotografías bien curiosas, como estas presentadas como "pastores vascos tejiendo". No he encontrado mucha más información, una pena, pero ya se ve que era una actividad bastante común en tiempos pasados.

El pie de foto de esta fotografía ponía Pastor tejiendo, pero me da que más bien está hilando... aunque no se le ve el huso, parece que lo hace mano... no lo sé.


En esta fotografía, recogida de la revista Androphilia, se ve a dos pastores de las Landas, País Vasco-francés, con la rueca e hilando, mientras están con sus ovejas. Es de la década de los años 20 del pasado siglo.

Por primera vez, publico el mismo post en mis dos blogs, en Avantales, mi blog de Ayoó y en Denetariko lanak, mi blog de las cosas que hago. 

viernes, 8 de abril de 2022

Back to school

Organizando mis fotos, veo que no he sacado por aquí esta chaqueta de bebé que hice como Testknit para la diseñadora portuguesa Agasalhos e bugalhos, Sandra.


En el grupo de tejedoras en el que estoy ya hemos hecho varios test para ella porque tiene diseños muy bonitos, sus test son sin agobios, ella es muy maja y en definitiva, es un placer y terminas con una prenda bonita seguro.

Lo tejí con cosas que tenía por casa Caricia de color verde y gris y un resto de mostaza para la banda. 100 gr, 80% acrílico y 20% lana

Agujas de 5mm para el cuerpo y 4mm para el ribete.



He hecho la variación seamless, sin costuras. El patrón que recibí para el test era para hacer la chaqueta por partes y coserla pero le comenté a Sandra si podía hacer el cuerpo unido, todo a la vez y me dijo que estaba justo preparando una variación para hacerla así, así que seguí las nuevas instrucciones Seamless.


Los hombros se pueden hacer con kichener, que no se notaría el tránsito de un lado a otro, o con cierre a tres agujas, que queda como una costura. Yo he elegido esta segunda opción, que era la primera vez que la probaba.



He hecho, por equivocación, la talla 3-4 años, pero al final se ajusta más bien a las medidas de la talla de 2 años.

Le he puesto snaps en el cierre. He cosido una tira blanca en la parte de atrás, así que he combinado los snaps una parte gris y otra blanca (la que va sobre la banda de ese color). 5 cierres.



La tira se hace recogiendo puntos. El cuello se hace recogiendo puntos, incluida la tira.

Tiene un truquito muy simple efectivo para que las rayas del elástico se vean sin puntos del revés entrelazados por la parte del derecho.





Es una chaqueta muy molona, tipo las universitarias americanas, mucha gente le ha bordado una letra en el lateral. Yo le he puesto un parche de estrella galáctica brillante y una tira en la manga, que pone Konichiwua (tal cual) y que tenía hacía años, compradas en Stradivarius.


Un modelo sencillo y entretenido, en tallas desde bebé a 14 años.


viernes, 1 de abril de 2022

Manta de ondas

Del baúl de los recuerdos saco esta mantita que tejí para un bebé hace unos añitos (9) y que me sigue pareciendo muy actual: los colores me parecen muy bien combinados y el punto usado es bastante atemporal.


Quería algo "moderno", no la mantita más típica en tonos pasteles (que también me gustan mucho, pero a cada madre su estilo de manta!!) y busqué combinaciones de colores en internet. Cuando encontré algo que me gustaba, fui hasta la tienda de Hilados Gordobil, que venden lanas e hilados al peso en Bilbao (dos tiendas y otra más en Basauri) y allí me buscaron lo más parecido a lo que llevaba en estas lanas de merino que se ven en la foto. 


El punto quería que fuera uno de ondas, pero hay mil variaciones. Al final encontré este, con un esquema de onda redondeada, suave, una vuelta a punto alto y la otra a punto bajo. Y un color y otro color y otro color y listo, lo que ahora se llama colorblock. Remate con punto cangrejo por arriba y por abajo y listo. Manta terminada.



Me gustó en su momento y me sigue gustando cuando la veo en fotos. A la mami también le gustó y me contaba que se la llevaba al bebé a todas horas, hasta bien mayorcito.


Como se ve, no hay que complicarse mucho para hacer algo bonito y "usable".