Bolsitas que apenas pesan, con un cierre, para meter la fruta que se viene a casa. En el super suelen venir embolsadas, pero procuro comprar sueltas o, mejor aún, en frutería de barrio, que ahí si que no tienes problema para llevarlas y que te pongan lo que compres en ella.
Hice un pedido a Cal Joan y cogí Mesh, lo que es, en si mismo, un poco de contrasentido. El mesh es el tejido que llevan por ejemplo, los bañadores por dentro y su composición es 100% poliéster, es decir, una fibra plástica. Pero bueno, es lo que hay. Mejor usar este tejido de plástico una vez que bolsas y bolsas y bolsas una y otra vez.
Lo cogí en Cal Joan porque en tienda local no lo he visto y ahí sabía que tenían fijo. Y ya de paso, cayeron algunas otras telitas (yo no he sido....)
El mesh es justo lo que está abajo... es que era lo menos vistoso de la compra, ja ja!!! |
El tejido estira bastante en una dirección pero no en la otra. He puesto la zona que estiraba a lo ancho y la que no estiraba, a lo largo. Para coser he usado una puntada zig zag muy juntita y ancha, porque aunque se cosía bien, con los agujeritos me parecía que así quedaba mejor rematado.
Todavía no he estrenado las bolsas. De hecho, aún solo tengo una bolsa terminada del todo porque no tenía cordón más que para una. Pero ya hay otras cinco cosidas y ocho preparadas.
Yo las usaré, pero también mi sobrina está muy concienciada con estas cosas y le voy a dar unas cuantas. El cierre, tanca parece que se llamada (ahorcadores en México, toma nombre!) es absolutamente reciclado... ¡¡por fin veo que mi afán por desmantelar todo lo usable de las prendas antes de tirarlas, sirve para algo!!!
No tiene ningún secreto la costura, pero si alguien tiene dudas, hay dos tutoriales sencillos y completos: el de Anna de Cal Joan en su blog y el de Menudo Numerito.
Y con mi bolsita, me acerco al Mimi de Malas Costureras de hoy.
Los ayudantes haciendo valoración de calidad de materiales... |